A través de un sistema de retorno en instalaciones sin retorno podrás ahorrar energía y agua

Última actualización: 09.10.24

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La sostenibilidad es una de las metas que intenta conseguirse en el hogar, para hacer más eficiente el consumo en pro del ahorro energético y del agua. Un sistema sencillo para lograr este ahorro es a través de una instalación de sistema de retorno en los equipos que no lo tienen para ahorrar agua y energía, siendo esta una solución efectiva para el agua caliente. 

 

Instalar un sistema de retorno en los equipos que no lo poseen es una solución sencilla, fácil de colocar y práctica, que supone una baja inversión y que se traduciría en un ahorro significativo de agua y electricidad. Este tipo de sistema es conveniente en gran medida en los hogares donde hay instalaciones con agua caliente sanitaria individual. Por lo general, este tipo de agua tarda en llegar al grifo donde se consumirá. Por ello, la instalación integrada por una bomba de impulsión, un activador y un bypass que se comunican de forma inalámbrica, será el medio para aumentar la eficiencia de la energía y reducir el consumo de agua en el hogar.

 

Cuidar el agua es tarea de todos 

El agua es vida y es uno de los elementos más importantes para el desarrollo sostenible de la tierra y de todos sus seres vivos. Por lo tanto, es necesario cuidarla y evitar su derroche. Para hacerlo, se pueden crear mecanismos en las instalaciones públicas y de los hogares, además de apoyar la conciencia ambiental, a través de una educación de racionamiento, porque estas sencillas acciones tienen repercusiones en la factura y en el planeta. 

En los hogares es común emplear grifos con monomando o bimando, siendo posible seleccionar el caudal de agua y la temperatura de esta, de acuerdo a las preferencias. Sin embargo, cada instalación de agua caliente sanitaria puede ser distinta y funcionar con diferentes sistemas de calentamiento. Es decir, puede ser a través de termos eléctricos, placas solares, energía aerotérmica, calentador a gas, gasoil, entre otros. 

 

 

Los problemas de derroche

Otra situación común que se presenta es que los usuarios abren el agua de la ducha o del lavabo y dejan escapar el agua hasta que esta alcanza la temperatura deseada, el resto de líquido se desperdicia hacia el desagüe y puede ser entre los 6 y 30 litros. Ahora bien, a través de un sistema de retorno, es posible solventar esta problemática. 

Esto es algo que suele ocurrir en instalaciones de vieja data, en edificaciones con sistemas de agua caliente sanitaria individual. En estas viviendas, una vez que el agua entra en el hogar toma dos direcciones, una que va hacia la producción de agua caliente y otra para el agua fría. 

 

Nuevas instalaciones 

Por el contrario, en las edificaciones modernas, los expertos y proyectistas han creado sistemas más eficientes con una red de retorno a la instalación de agua caliente sanitaria. De esta forma, el usuario tendrá agua caliente de forma inmediata. 

Sin embargo, no todo es tan sencillo. Aunque se trata de un sistema eficiente en la generación de agua caliente y para el ahorro del vital líquido, también supone un gran gasto energético porque debe recircular de forma continua. El coste de este proceso está entre los 75 y los 250 euros de acuerdo al tipo de calentamiento. 

 

Solución a bajo coste

De cualquier modo, puede haber una solución. Se trata de crear una red de retorno en las instalaciones que no la tengan habilitada. Para hacer esto, se debe reciclar el agua fría a través de la tubería de agua caliente o viceversa. Para solucionar el problema del desperdicio al abrir el grifo y reducir el consumo de energía, se debe recircular el agua de la tubería que estará a temperatura ambiente en la tubería de agua fría.

Para ello, es preciso contar con una bomba de recirculación que se encargue de impulsar el agua caliente y con una presión mayor a la que hay en la tubería de agua fría. Para que el proceso sea adecuado, se deben incorporar algunos elementos para el control, lo que evitará que el sistema funcione de forma continua. 

Es aquí cuando se hace necesario el uso del activador y de un sistema de bypass. A través de este último, se podrá enviar el agua de la tubería caliente hacia la del agua fría, sin que esta pase por el grifo, con ayuda de una electroválvula. Cuando este elemento abra, se producirá una presión en el agua caliente, un poco mayor a la del agua fría. Como resultado, el agua se orientará a la tubería de agua fría. Ahora bien, cuando el bypass se cierre, recibirá una orden dada por un sensor de temperatura que cerrará la electroválvula.

A través del activador, se producirá la puesta en marcha del funcionamiento del sistema cuando el usuario lo requiera. Por ello, en lugar de abrir el grifo y esperar por el agua caliente, el usuario deberá poner a funcionar el activador, que se iluminará en azul para indicar que el agua que saldrá será fría. 

 

 

Acto seguido, el activador iniciará el funcionamiento de la bomba de recirculación y el  bypass. De esta forma, el agua que circula por la tubería caliente, pero que está fría, pasará hacia la tubería de agua fría. Seguidamente, el agua caliente impulsada por el sistema de bombeo llegará al bypass. 

En este momento, el sensor ordenará cerrar el bypass y la bomba para avisar a la persona que el agua ya está disponible, todo esto a través de un aviso luminoso en rojo. Como resultado, el usuario obtendrá agua caliente sin haber desperdiciado ni una gota de agua en el proceso. 

Este tipo de instalación puede aprovecharse en distintos espacios para optimizar el consumo de agua caliente y mejorar la eficiencia energética. Independientemente de si se cuenta con uno de los mejores termos eléctricos del 2024, que esté equipado con un sistema eficiente de consumo, esta es una forma de ahorrar agua y energía con mayor incidencia.

Lo positivo en este tipo de instalación es que no afecta al resto de los elementos y se pueden ejecutar tanto en edificaciones antiguas como en espacios nuevos, porque es compatible incluso con instalaciones de retorno.  A través de este mecanismo se pueden conseguir resultados positivos para la ecología, economía y confort del usuario.

 

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